La ciudad más grande de Canadá y también la más vibrante esconde rincones que merecen ser descubiertos. Una metrópoli situada a orillas del lago Ontario que mezcla el dinamismo de una gran ciudad con la calidez de una comunidad diversa y acogedora y con muchos espacios naturales. Sus numerosos parques, como High Park o las Toronto Islands, ofrecen un respiro verde en medio del bullicio, perfectos para paseos, ciclismo o simplemente disfrutar del horizonte sobre el lago. A ello se le agregan infinitos eventos durante todo el año, como el Festival Internacional de Cine de Toronto (TIFF) o el Caribana. ¿El resultado? Una ciudad que no deja de sorprender y que merece estar en la lista de próximos destinos.
¿DÓNDE ALOJARSE?
La pregunta solo tiene una respuesta posible: el 1 Hotel Toronto, un nuevo referente sostenible y de lujo en pleno centro, en el vibrante barrio de King West. Inaugurado en 2021, se trata del primer establecimiento de la cadena eco‑chic 1 Hotels en Canadá, con una apuesta por el diseño y el cuidado del medio ambiente que sorprende a todo viajero. Una obra maestra del estudio Rockwell Group, con piezas únicas hechas por estudios locales como Just Be Woodsy (muebles) o Timberlost (arte floral).
Todo el complejo es una oda al arte del slow living, con una apuesta de colores suaves y materiales cálidos: madera natural, mármol así como muebles orgánicos, que transmiten calma y conectan con la naturaleza. Además, el hotel cuenta con varios restaurantes con menús elaborados con ingredientes de temporada y proximidad. Destaca el 1 Kitchen, donde disfrutar de deliciosos desayunos, brunch y comidas con una apuesta farm to table. Así como Harriet’s, ubicado en el rooftop, es el paraíso escondido del hotel donde comer o disfrutar de exquisitos cócteles de autor con las mejores vistas a todo Toronto es una realidad.
VISITAS IMPRESCINDIBLES
Visitar Toronto implica visitar sí o sí algunas de sus atracciones (que no son pocas). Y por supuesto, la primera es la emblemática Torre CN. Hablamos de una de las estructuras más altas del mundo – 553 metros – y símbolo icónico de la ciudad. Imprescindible subir al mirador, caminar sobre el suelo de cristal y para los más atrevidos, hacer el EdgeWalk, un paseo al aire libre alrededor de la cima.
El Royal Ontario Museum (ROM) es otra parada muy famosa: uno de los museos más grandes de Canadá, con colecciones impresionantes de historia natural, arte, arqueología y culturas del mundo. La arquitectura del edificio combina lo clásico y lo moderno, con una fachada de cristal que llama la atención.
Y por supuesto, el Mercado de St. Lawrence (St. Lawrence Market), merece también un sitio en la lista. Un paraíso para los amantes de la gastronomía con puestos que ofrecen productos frescos, embutidos, quesos y especialidades locales como el famoso peameal bacon sandwich. Ideal para probar sabores auténticos canadienses.
La Yong-Dundas Square es otra visita indispensable. En otras palabras, el “Times Square” de Toronto. Esta plaza es un centro neurálgico lleno de pantallas, tiendas, espectáculos callejeros y eventos y se encuentra muy cerca del enorme centro comercial Eaton Centre. Y para los amantes de la historia Casa Loma es su lugar. Un castillo en plena ciudad de estilo neogótico que parece sacada de un cuento, con torres, jardines y túneles secretos. ¡Una maravilla!
Y no hay mejor lugar para terminar el día que visitando el Distrito de la Destilería (Distillery District), un encantador barrio peatonal de calles adoquinadas, lleno de galerías de arte, tiendas boutique, cafés y cervecerías artesanales. Conserva su arquitectura industrial victoriana y es ideal para pasear y disfrutar de un ambiente bohemio y cultural.
CATARATAS DEL NIÁGARA
Con taxi, autobús, coche privado o incluso con tren: muy cerca de la ciudad de Toronto se encuentran las emblemáticas Cataratas del Niágara (Niagra Falls). Hablamos de una de las maravillas naturales más famosas del mundo, y desde Toronto están a solo unos 130 kilómetros, lo que las convierte en una excursión de un día muy popular para quienes visitan la ciudad. Tres enormes cascadas situadas en la frontera entre Canadá y Estados Unidos, sobre el río Niágara, que conecta el lago Erie con el lago Ontario: las Horseshoe Falls (Catarata de la Herradura) – la más grande y espectacular, del lado canadiense; la American Falls (Catarata Americana) – del lado estadounidense y la Bridal Veil Falls (Catarata del Velo de Novia) – una más pequeña, también en EE.UU., junto a las American Falls.
HABLEMOS DE GASTRONOMÍA
La gastronomía de Toronto es tan diversa y multicultural como la ciudad misma. Gracias a su población compuesta por comunidades de todo el mundo, la metrópolis no tiene una sola “cocina típica”, sino que ofrece una fusión vibrante de sabores internacionales, reinterpretados muchas veces con un toque canadiense o local. El anteriormente mencionado, el Peameal Bacon Sandwich, es uno de sus platos estrella, también conocido como «Toronto sandwich», es un sándwich de panceta de cerdo curada y recubierta en harina de maíz amarilla.
Le sigue el Poutine, aunque originario de Quebec, se encuentra por todo Toronto y consiste en papas fritas con queso en grano y salsa caliente (gravy). Se sirven en versiones clásicas o con toppings como pulled pork, huevo, etc. Finalmente, merece también ser mencionado la Butter Tart, un postre típico: una tartaleta de mantequilla, azúcar, jarabe y huevo, a veces con pasas o nueces. Dulce, pegajoso y delicioso. Además, Toronto cuenta con una rica cultura en cerveza artesanal, con muchas micro cervecerías locales.
Sin lugar a dudas, Toronto es una ciudad vibrante, diversa y llena de contrastes, donde la modernidad convive con la cultura global. Perfecta para quienes buscan experiencias urbanas únicas sin alejarse de la naturaleza. Un destino que sorprende y enamora en cada rincón.
