Preparación:

  1. Prender la parrilla, que debe tener espacio para dar vuelta el pescado y un carbón a punto fuerte.

    Pedir en la pescadería que desviceren el pescado (este caso fue cabrilla). Luego limpiar bien con un papel absorbente el pescado por dentro y por fuera. Llevar a una tabla y agregar sal, pimienta y aceite de oliva en la cavidad del estómago. Cortar el limón en rodajas finas y deshojar el perejil, dejando parte de los tallos, que están llenos de sabor. Agregar de manera pareja en la cavidad, primero el limón y después el perejil, dejando que algo del relleno salga del pescado para que, en contacto con el fuego, se dore y potencie el sabor y aroma. Agregar sal y aceite de oliva por la piel, reservar. Cortar un limón en mitad a lo ancho para dorar en la parrilla, esto lo carameliza y lo hace más dulce y jugoso.

    Tener la parrilla muy limpia y caliente, hacer una pelota de papel absorbente y sumergir la punta en aceite vegetal. Con la ayuda de las pinzas, pasar sobre los fierros de la parrilla y así el pescado se sellaré muy bien y se despegará.

    Llevar el pescado a la parrilla con las manos, dejar sobre ella, sin mover, por al menos 7 minutos y que se caramelice la piel a punto que se despegue fácilmente. Dar vuelta con la ayuda de una espátula, tomando el pescado desde la cola. Cocinar 4 minutos más dependiendo del porte.

    Mientras, limpiar y deshojar todas las hierbas de la ensalada, dejando los tallos más cerca de la hoja, ya que tienen mucho sabor y textura. Llevar a un bol, y aliñar justo antes de servir con sal y aceite de oliva.