Preparación:

  1. Precalentar el horno a 180 °C.

  2. Cortar la cebolla en pluma.
    Poner la mantequilla en un sartén a fuego medio; una vez derretida, agregar la miel de palma y la cebolla, y cocinar por 4 minutos revolviendo constantemente.

  3. Poner la cebolla en un molde (que pueda ir al horno y de unos 20 cms de diámetro aproximadamente) o en un sartén de fierro, previamente enmantequillado.
    Cortar las betarragas en rodajas de aproximadamente un centímetro y distribuir sobre la cama de cebollas.

  4. Poner la masa sobre el molde para que tape completamente la cama de cebollas y betarragas, cuidando que los bordes de la masa queden dentro del molde, tocando la base de éste.
    Pinchar la masa con un tenedor y cocinar en el horno por 35 a 40 minutos o hasta que la masa esté dorada.

  5. Sacar del horno, poner un plato plano encima, dar vuelta y desmoldar mientras esté caliente para evitar que la cebolla quede pegada al molde.
    Dejar entibiar y decorar con la rúcula, el queso y un chorrito de aceite de oliva.