Feliz Navidad
Casas que celebran lo mejor de cada estilo
Terminé este año haciendo algo que nunca antes habia hecho… Me invitaron de La Escuela a hacer un workshop sobre cómo hacer revistas de decoración. La idea es que fueran ocho clases más bien prácticas, lo que me obligó a pensar en el paso a paso de nuestro trabajo en ED, un ejercicio que rara vez hacemos, porque después de tantos años es un proceso bien de guata, casi inconsciente y tan natural como levantarse… Cómo se organiza un equipo, cómo nos inspiramos, cómo ha sido nuestra historia, cómo se generan los contenidos… Finalmente terminó siendo un proceso educativo para mí también el recordar nuestros comienzos y objetivos, y repasar los desafíos permanentes por los que atravesamos los medios de comunicación en un mercado tan chico como es el chileno, cómo tenemos que seguir reinventándonos año a año sin perder la esencia y, sobre todo, cómo sobrevivir a un mundo cada vez más digital. Ese era uno de los temas que más le intrigaba a las alumnas… Ese es el tema la verdad. Michael Boodro, editor de Elle Decor, decía en una entrevista que la única forma de que un medio escrito sobreviviera a su propia versión digital era transformarse en un objeto de lujo. Y tiene razón. En internet es más fácil hacerse famoso, eso lo vemos a diario, pero cuesta mantenerse, es una plataforma rápida, cambiante, instantánea; en cambio el papel tiene otro ritmo. En ED hay meses de planificación, las fotografías se toman en la estación adecuada y muchas veces se guardan por meses para publicarlas en el número preciso… Todos coinciden en que el mundo será cada vez más online, y las revistas como ED, serán consideradas como un objeto de colección, no sólo por su papel y excelencia, sino porque se hacen con el mismo tiempo, calidad y pasión que, por ejemplo, una película. Y esa dedicación también va quedando impresa, aunque de manera intangible, en cada página. Por último, una suscripción a una buena revista de decoración siempre será un lindo regalo de Navidad…
En esta edición, la última del año, fotografiamos las casas de personas que comparten esa pasión por lo que hacen y que logran transmitirla en sus trabajos y lugares: Francisca Sutil con su silenciosa casa-taller en el campo; María Inés Ossa con su espectacular casa en las alturas; un arquitecto minucioso y pulcro y su departamento lleno de libros y Legos; y una casa en Umbría, cerca de la Toscana, decorada por el interiorista Eric Egan, con lo mejor de ayer y de hoy.
Una buena reflexión para terminar y empezar un año es justamente imprimirle emoción y sentimiento a nuestro quehacer diario, a nuestros espacios, a nuestra familia… a la vida misma… ¡Muy Feliz Navidad! Nos vemos el próximo año con un lindo número de verano y esas casas que nos hacen sentirnos de vacaciones.
Magdalena Bock, Directora.
magdalenabock@ed.cl