Entre la dirección de arte, el interiorismo y la curiosidad por los materiales, la diseñadora Elisa Smart dio forma a Humo Apt, un estudio y tienda de diseño con base en Santiago que reúne objetos para el hogar, textiles, cerámicas y piezas de mobiliario, creados bajo una mirada sensible y atemporal.
La filosofía de la marca está contenida en su nombre. Humo es la “señal de que algo está tomando forma”, mientras que Apt (de apartamento) le da el lugar: “un refugio, una habitación imaginaria donde los objetos encuentran su propio ritmo y su tiempo de ser”. De esa idea nacen colecciones limitadas de objetos que buscan acompañar la vida diaria con belleza y propósito: cojines, porta cubiertos, mesas laterales, cerámicas y textiles para la mesa, pensados para moverse entre distintos espacios, sin apuro.
Hasta ahora, la marca ha desarrollado dos colecciones. El arte del revelo, inspirada en la aparición de lo nuevo y lo imperfectamente cotidiano, y Yugen, una exploración del concepto japonés de la “profundidad misteriosa de la belleza”, que combina la manufactura local con una estética minimalista y contemporánea.
Elisa concibe su proyecto como un espacio de creación colectiva. Humo Apt integra tanto diseños propios como colaboraciones con ceramistas, costureras, artistas y otros diseñadores. Para ella, estos lazos enriquecen el trabajo al permitir expandir talentos y descubrir nuevos procesos. El objetivo es que la visión del colaborador se integre a un ritmo compartido, para que cada objeto comparta la estética del estudio. “La idea no es imponer, sino integrar la visión del otro dentro de un ritmo compartido, donde cada pieza conserve su carácter”, explica Elisa.
Aunque hoy funciona principalmente como tienda online, el proyecto se concibe como una curaduría de objetos. Más que una venta, cada entrega busca crear una experiencia cercana: piezas envueltas con cuidado, aroma, detalles. “Me importa que quien reciba una pieza sienta dedicación. Que no solo compre un objeto, sino que se lleve algo de nuestra forma de mirar”, dice Elisa.
Hoy, Elisa sueña con ver a Humo transmutar en un espacio físico que no sea solo una tienda, sino “más bien un taller de diseño, como esos espacios de artistas donde sucede todo” para seguir creando, colaborando y concretando ese “apartamento” que hoy habita en el mundo digital.
