En el corazón de Providencia, al fondo de una casona transformada en taller de oficios, se encuentra The Urban Jungle, una tienda de plantas donde cada ejemplar ha sido escogido, cuidado y exhibido con dedicación. No es un vivero cualquiera: es una mezcla entre galería botánica, espacio de asesoría y refugio verde en plena ciudad.
Su fundadora, Valentina Hasbún, partió el proyecto en 2019, luego de volver a Chile tras vivir en el extranjero. «En ese viaje conocí tiendas de plantas con verdadera curatoría, no sólo viveros. Lugares con estilo, dedicación, que me dejaron con la idea dando vueltas», cuenta. Y así fue como, sin un trabajo fijo al que volver y con muchas ganas de emprender, decidió lanzarse con lo que hasta entonces había sido solo un hobby.
Como muchos emprendimientos contemporáneos, este proyecto dio sus primeros pasos en Instagram. Valentina inició con una cuidadosa selección de plantas y maceteros, creando combinaciones únicas que ofrecía listas para decorar y ambientar cualquier espacio. La pandemia, contrariamente a lo esperado, impulsó su crecimiento, llevándola a establecer su showroom en Providencia. “Tuve que buscar un espacio físico porque ya no me cabían más plantas en el departamento”, recuerda.
The Urban Jungle se define como una tienda de plantas esencialmente urbana, especializada en especies de interior y opciones para terrazas pequeñas. Su diferenciador principal reside en la calidad y la elección de cada planta, seleccionada una a una por Valentina, quien se dedica a cuidarlas y exhibirlas con dedicación. «Lo que diferencia esta tienda de los viveros masivos es la calidad. Aquí todo está pensado: las plantas, los maceteros, los insumos y también la asesoría. La gente se va con todo lo que necesita, y con las ganas de cuidar bien su planta».
En estos años, Valentina ha visto cómo el mundo de las plantas ha dejado de ser algo de nicho. Hoy, llegan a su tienda abuelas, adolescentes, hombres, mujeres y niños. «Ya no tienes que ser ‘la señora de las plantas’. Solo tener ganas y un poco de dedicación». Entre las tendencias que ha identificado, destaca dos: las plantas como terapia, una forma de conexión con la naturaleza en medio de la ciudad, y el plant styling, donde las plantas se integran como parte fundamental de la decoración. «Son tendencias que se complementan: casas lindas, vivas, y tiempo de calidad dedicado a cuidarlas».
Trabajar con seres vivos es, sin duda, lo más desafiante de este emprendimiento, ya que implica una dedicación constante, incluso los fines de semana, especialmente en verano. Sin embargo, para Valentina, la satisfacción de hacer lo que le apasiona y de ver la alegría de sus clientes es la mayor recompensa. «Aunque llegues a tu casa cansado al final de la jornada, te inunda una sensación de satisfacción que yo al menos no he sentido con ninguna otra experiencia en la vida», expresa.
Hoy, The Urban Jungle sigue creciendo. El próximo paso: fortalecer la venta online sin perder la esencia del proyecto. Y también, soñar con un futuro donde las plantas lleguen a personas que no siempre tienen acceso a ellas. «Me interesa que esto siga siendo local, que cree comunidad. Las plantas tienen ese poder».
Es posible conocer más en su showroom en ubicado en Traiguén 2260, Providencia o seguir su cuenta de Instagram @theurbanjungle.cl