Las Pretty Ballerinas se hicieron conocidas el día en que Letizia Ortiz decidió bajarse de sus “letizios”. Fue durante un evento oficial en Madrid, en 2009, cuando la actual reina de España –un referente de estilo y elegancia– demostró que para verse bien no era necesario andar siempre de taco. Ese día dejó a un lado sus clásicos peep toes y se puso unas ballerinas color beige con cristales Swarovski de esta españolísima marca, las que causaron sensación.
Desde entonces estos zapatos se han tomado los eventos más top, las calles de las principales ciudades del mundo, las portadas de las revistas de moda y los clósets de las celebrities, lo que no es de extrañar, ya que fueron creados pensando en ellas. Cada modelo tiene el nombre de un icono del cine o de la música, como Marilyn Monroe o Shirley Temple, e incluso hay quienes han mandado a hacer las propias según sus gustos. La clave de su éxito está en que tienen más de 300 modelos por colección, las hay para todas las edades, son hechas con cueros y pieles de primera calidad y el diseño está a cargo de Ursula Mascaró, su dueña y heredera de un verdadero imperio familiar.
Los Mascaró tienen años de circo. Partieron como un taller artesanal de zapatillas de ballet en Menorca, en 1918, y hoy son una reconocida firma internacional que incluye las marcas Ursula Mascaró, Jaime Mascaró y Pretty Ballerinas. Esta última se creó en 2005 como una tienda online, cuando Ursula y su ex marido, el inglés David Bell, decidieron “volver a los orígenes” y crear una marca exclusiva de zapatillas planas. Hoy tiene cerca de 90 locales, en más de 20 países, y el 50% de la producción de Mascaró corresponde a ballerinas.
Dicen que no hay mujer que tenga unas Pretty Ballerinas y no quiera un segundo par. Eso fue lo que le pasó a la chilena Tatiana Fernández hace más de cinco años, cuando las conoció en España: “Fue amor a primera vista”. Luego de habérselas encargado a cada persona que viajaba, decidió que las tenía que traer a Chile. Hace dos años se contactó por primera vez con David Bell y tras una serie de e-mails, llamadas y un viaje a Menorca, se quedó con la franquicia. En julio instaló la tienda en Isidora Goyenechea, con una decoración que sigue el diseño de las del resto del mundo: harto rosado para resaltar la feminidad, contraste con negro para destacar el carácter de las mujeres que se atreven a bajarse de los tacos, lámparas de lágrimas y objetos dorados como símbolos de elegancia, y toques de animal print, muy propios de una mujer sexy.
“Cuesta que las chilenas usen ballerinas en invierno, para ellas esta época es igual a botas. En otros países uno puede ver que las mujeres las usan aún cuando hace frío”, dice Tatiana. Dentro de la colección de esta temporada se incluyen botines y zapatos estilo Oxford para las más friolentas, todos sin taco. ¡Veamos quién se atreve!
Isidora Goyenechea 3278. www.prettyballerinas.cl